Mis favoritos

sábado, 16 de abril de 2011

Tejiendo en gris y blanco

Mangee brinca del pasado al presente como quien respira.

Apenas quiere amanecer y lleva despierta mas de una hora.

Apenas anoche trataba de leer cuando alguien la tapó con la sábana, apagó las luces y cerró la puerta para que pudiera dormir en silencio casi absoluto.

Y hoy, sigue apenas amaneciendo y solo escucha coches pasando a unos 60kms por hora por la calle, los mismos a los que ella frena para entrar cada tarde por la reja que abre cualquiera de los dos policías de turnos de 24hrs que se llaman iguamente Alfredo.
Y paradojicamente, en medio de todos los pisos de ventanas, concreto y tuberías que no tienen árboles, se cuela el piar de los pajaros que ya amanecieron igual que ella y que viven en los árboles que no ve.

Antes Mangee vivía de aventuras, ahora vive de esperanzas pacíficas.

Hoy por la tarde dará puntadas a esos tejidos grises y blancos para Greta, -al menos eso cree-. 
Siempre que intenta tejer puntadas con ganchillo o con agujas del número seis, las cambia por tejer historias con palabras, -leídas, escritas o contadas a viva voz en medio de todos y nadas-.

Seguro eso pasará a las seis de la tarde, cuando se imagine sentada con todas esas viudas de generales, bebiendo vermouth con vistas al palacio de Oriente tratando de tejer mientras desteje.

Como Penélope.

Y hasta que el destino nos alcance.

Vermouth. Foto S

1 comentario:

TORO SALVAJE dijo...

Ya murió.
Queda su sombra.

Besos.