Hay días que van enlazados unos con otros con hechos, circunstancias que parecen bajo control pero que están totalmente descontrolados y son perfectamente inconexos.
¿Será la luna de febrero, el calentamiento global, el terremoto en Nueva Zelanda, el movimiento en Libia, el narcotráfico en mi país, el segundo mes del invierno o el mes que falta para la primavera?
Así pasa de repente...
Y en vez de componerse, van en reacción en cadena...
Como esa bola de nieve que crece y crece y además se acelera en la caída...
Y entonces, me detengo con la frente medio tensa de tanto fruncir el ceño.
Analizo.
Diseco.
Respiro.
Me encabrono y me desencabrono...
Y pienso que como todo, tiene una inexplicable, inaudita, increíble razón de ser...
Que mañana, como anoche, me estaré carcajeando sin control, con lágrimas en los ojos y dolor de panza de tan fuerte que es la risa.
1 comentario:
Desencabronada y carcajeándote te ves mucho mejor.
Besos.
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