Lo anoté en mi agenda (muy bonita, negra, Moleskine) hace ya cuatro semanas.
Todo con letra muy clara: cumpleaños, citas, marcar lunas nuevas y llenas...vacaciones, puentes, días que olvidar y los que no olvidar...
Y el mas importante era el día de hoy...
Pero después de diez días de vacaciones y romance extremo, pues hoy regresé a la realidad muy atolondrada, con la mente en un lugar y el corazón en otro.
A mi escritorio, mi computadora, mi soledad acompañada.
Mis pendientes, mis planes, mis todos.
Mis nadas.
Y ya había pasado mas de medio día cuando empecé a buscar una pluma para escribir un cheque, y al momento de poner la fecha miré mi reloj que marcaba casi la una, y el 1 de febrero.
Un día precioso.
Soleado.
Caliente.
Un día puramente brigidiano.
Feliz día de Santa Brígida, de Imbolcs, renacimientos, fuegos y fertilidades y muertes chiquitas...
(eso si, tengo la mente y los dedos atrofiados, siento que solo se me ocurren pendejadas...nada literariamente ni tantito interesante...pero así hay días, tiene que haberlos...)
1 comentario:
Espero que el de hoy sea magnífico también.
Besos.
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