Mis favoritos

martes, 31 de enero de 2012

Dos

Hoy se abre el tercer ciclo de mi segunda vida.

Hoy sigo aletargada de esa voz deprimente que no entiendo que me dice, que se escucha en lamentos cuando menos la he esperado entre campanadas de iglesia que llaman a misas sin gente cada hora, durante veinticuatro horas seguidas todos los días y gallos que cantan a deshoras.

Hoy pienso en ti, en él, en mi, en ellos, en nosotras, en el que me borró de su vida con un delete inyectado de rencores, en el que borré un día sin miramientos, en mi futuro sin porvenir pero con paz.
Sola pero conmigo.

Anochecí pensando en los barrotes de madera de la cama del bosque aprisionados por mi mano derecha mientras quería hacernos el amor y no podíamos hasta que dulcemente nos dimos por vencidos para dormir en medio de ruido de gatos en el tejado abrazados en una confidencia extraña que solo puede suceder entre tu y yo.
En un juramento de silencios después de confesarnos secretos, esos que nadie sabe mas que nosotros.

Amanecí pensando en el pajaro de pecho rojo, diminuto, que a horas exactas baila junto al toronjo que da al tepozteco.

Amanecí en oscuridad porque mañana Brigida me inundará de luz brillante.

Y entonces me levanté y cogí una pluma fuente invisible para empezar a garabatear mi día con sientos inimaginables en un grimorio negro con letras doradas.

Y me desvestí de una pijama de franela para cubrirme la piel tan solo de ese cielo naranja en ese atardecer en el que de un suspiro y un inspiro quise atrapar todas esas nubes.


Atardecer tepozteco

No hay comentarios: